Pelé está triste por como van los preparativos para el Mundial 2014

Pelé sigue preocupado por el avance de las obras en Brasil para el Mundial de fútbol 2014 y se mostró sorprendido por cómo se dieron los eventos tras las acusaciones de corrupción y pago de sobornos en la FIFA.

"Hicimos nuestro trabajo de traer la Copa del Mundo y la Olimpíada (del 2016) (...) y lamentablemente nos encontramos con lo que ustedes están viendo en Brasil y nos asusta mucho", declaró el ex astro el miércoles en rueda de prensa.

Los problemas de infraestructura y en los estadios ensombrecen el camino de Brasil para el torneo.

El estadio de Sao Paulo, candidato a ser sede de la apertura del Mundial, es el que más preocupa a las autoridades.

Las obras de preparación del terreno comenzaron el 30 de mayo, pero la ingeniería financiera para concluir el recinto para 65.000 espectadores aún no está finalizada.

La capital paulista fue descartada por la FIFA como sede de la Copa Confederaciones del 2013, torneo considerado una prueba para el Mundial.

Pelé también dijo estar sorprendido por la renuncia del vicepresidente de la FIFA, Jack Warner, esta semana.

El trinitario Warner estaba siendo investigado en el marco de un escándalo de venta de votos relacionado con la campaña del entonces candidato a presidente de la FIFA, Mohammed bin Hammam, que remeció a la entidad a comienzos de junio.

"Nuestro comité, que es el comité del deporte, no tiene ninguna influencia en este caso de los votos", se defendió Pelé, quien poco después del escándalo fue nombrado en un comité de "sabios" para que la FIFA supere esta situación.

El presidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol, Nicolás Leoz, quien estaba junto a Pelé, se mostró contrariado al tratar el asunto.

"Para la Conmebol, este es un asunto cerrado, no hay nada que agregar", declaró el dirigente paraguayo.

Al ser consultado sobre si la credibilidad de la FIFA fue afectada por el escándalo, Leoz respondió: "entiendo que no".

Leoz fue uno de los cuatro miembros del comité ejecutivo de la FIFA -junto con el presidente de la Confederación Brasileña, Ricardo Teixeira- acusados por un ex presidente de la federación inglesa de haber ofrecido vender sus votos para la candidatura de Inglaterra para el Mundial del 2018.